(18) Quien desee la vida efímera... En ella damos a quien queremos lo que queremos y luego lo destinamos a Yahannam donde entrará censurado y despreciado.
(19) Pero quien desee la Última Vida y se afane en su esfuerzo hacia ella siendo creyente... A ésos se les agradecerá su esfuerzo.
(20) A todos damos largueza, a unos y a otros, como parte del favor de tu Señor. El favor de tu Señor no está restringido.
(21) Observa cómo hemos favorecido a unos sobre otros. Pero la Última Vida es superior en grados y en preferencia.
(22) No pongas junto a Allah a ningún otro dios pues te quedarías reprobado y abandonado.
(23) Tu Señor ha ordenado que sólo Lo adoréis a Él y que hagáis el bien con los padres. Y si a alguno de ellos, o a los dos juntos, les llega la vejez junto a ti, no les digas "uff" ni los rechaces, sino que háblales con buenas palabras.
(24) Baja sobre ellos el ala de la humildad* que viene de la misericordia y di: ¡Señor mío! Ten piedad de ellos, al igual que ellos me criaron cuando era pequeño.
(25) Vuestro Señor sabe mejor lo que hay dentro de vosotros mismos. Si sois rectos... Es cierto que Él perdona a los que se remiten a Él.
(26) Y da a los parientes próximos lo que les corresponde, así como a los mendigos y al hijo del camino, pero no malgastes en derrochar.
(27) Verdaderamente los derrochadores son hermanos de los demonios y el Shaytán es ingrato con tu Señor.