(156) Y escribe para nosotros lo bueno en esta vida y en la Última pues hemos sido guiados a Ti. Dijo: Aflijo con Mi castigo a quien quiero y Mi misericordia abarca todas las cosas y la escribiré para los que sean temerosos, para los que entregen el zakat (la purificación de sus bienes) y para los que crean en Nuestros signos.
(157) Esos que siguen al Mensajero, el Profeta iletrado, al que encuentran descrito en la Torá y en el Inyil, y que les ordena lo reconocido y les prohíbe lo reprobable, les hace lícitas las cosas buenas e ilícitas las malas y los libera de las cargas y de las cadenas que pesaban sobre ellos.Y aquéllos que creen en él, le honran, le ayudan y siguen la luz que fue descendida con él; ésos son los afortunados.
(158) Di: ¡Hombres! Es cierto que yo soy para vosotros el Mensajero de Allah, a Quien pertenece la soberanía de los cielos y la tierra.No hay dios sino Él, da la vida y da la muerte; así que creed en Él y en Su Mensajero, el Profeta iletrado que cree en Allah y en Sus palabras y seguidle para que tal vez os guiéis.
(159) De la gente de Musa hay una comunidad que guía de acuerdo a la verdad y con ella hacen justicia.