(114) Dijo Isa, hijo de Maryam: ¡Allah, Señor nuestro! Haz que baje a nosotros una mesa servida procedente del cielo que sea para nosotros una conmemoración desde el primero hasta el último así como un signo procedente de Ti; y provéenos, pues Tú eres el mejor de los que proveen.
(115) Dijo Allah: La haré bajar para vosotros, pero al que después de esto reniegue, lo castigaré con un castigo que nadie en los mundos habrá conocido.
(116) Y cuando Allah dijo: ¡Isa, hijo de Maryam! ¿Has dicho tú a los hombres: Tomadme a mi y a mi madre como dioses aparte de Allah?Dijo: ¡Gloria a Ti! No me pertenece decir aquello a lo que no tengo derecho! Si lo hubiera dicho, Tú ya lo sabrías. Tú sabes lo que hay en mí, pero yo no sé lo que hay en Ti.Es cierto que Tú eres el Conocedor de lo más recóndito.
(117) Sólo les dije lo que me ordenaste: ¡Adorad a Allah, mi Señor y el vuestro! Y he sido testigo de ellos mientras permanecí en su compañía.Y cuando me llevaste a Ti, Tú eras Quien los observaba, Tú eres Testigo de todas las cosas.
(118) Si los castigas... Son Tus siervos; y si los perdonas... Tú eres ciertamente el Poderoso, el Sabio.
(119) Dijo Allah: Este es el día en que beneficiará a los veraces su veracidad; tendrán jardines por cuyo suelo corren los ríos donde serán inmortales para siempre.Allah estará satisfecho de ellos y ellos lo estarán de Él.Ese es el gran triunfo.
(120) De Allah es la soberanía de los cielos y de la tierra y de lo que hay entre ambos.Él es el que tiene poder sobre todas las cosas.