(23) Así mismo, antes de ti, no enviamos ningún advertidor a una ciudad sin que sus magnates no dijeran: Encontramos a nuestros padres en una determinada forma de vida y nos hemos dejado llevar por sus huellas.
(24) Di: ¿Y si yo os hubiera traído una guía mejor que aquélla en la que encontrasteis a vuestros padres? Dicen: No creemos en aquello con lo que habéis sido enviados.
(25) Y nos vengamos de ellos. Mira cómo acabaron los que negaron la verdad.
(26) Y cuando Ibrahim les dijo a sus padres y a su gente: Y estoy libre de lo que adoráis.
(27) Pero no de Aquel que me ha creado. Él me guiará.
(28) E hizo de ello una palabra que quedó en su posteridad para que pudieran volverse (a Allah).
(29) Sin embargo a éstos los he dejado que disfruten, al igual que a sus padres, hasta que les ha llegado la verdad y un mensajero explícito.
(30) Pero cuando la verdad les ha llegado, han dicho: Esto es magia, nosotros no nos lo creemos.
(31) Y han dicho: ¿Por qué no se le ha hecho descender esta Recitación a un hombre importante de las dos ciudades*?
(32) ¿Acaso son ellos los que reparten la misericordia de Allah?Nosotros repartimos entre ellos sus medios de vida en este mundo y hemos elevado en grados a unos sobre otros, para que unos tomaran a su servicio a otros.Pero la misericordia de tu Señor es mejor que lo que reúnen.
(33) Y si no fuera porque los hombres acabarían siendo una única comunidad*, habríamos hecho que las casas de los que niegan al Misericordioso tuvieran techos de plata y escalinatas para subir por ellas.